Descubrir y escalar puertos es el motor que nos empuja a seguir pedaleando el país y por eso creamos los BikeCamps: cortas travesías mediante las cuales nos enfocamos en realizar el mayor número ascensos posibles.
La segunda edición de esta aventura fue en Antioquia, unas horas después de pedalear los 443 Km con 8.536 m desnivel que acumulamos en nuestra travesía Bogotá-Medellín.
El resultado fue increíble porque después de 314 Km (6.697 m desnivel) logramos conocer los puertos que embellecen la capital de la montaña.
Jornada 1: Santa Elena, Los Topos, El Escobero
Un viernes 3 de enero, muy de mañana, salimos de Rionegro rumbo al Aeropuerto Internacional Jose María Córdoba para realizar el circuito que nos permitiría conquistar tres premios de montaña. El primero de ellos es Santa Elena (7.6 Km, 5%) ubicado sobre la paralela al Túnel de Oriente y cuya cumbre, a 2 Km de la Biblioteca Santa Elena, la alcanzamos hasta después de 42 min. Con un tercio del objetivo cumplido, descendemos rápidamente a la entrada del túnel y ya estamos en Alto los Topos (11 Km, 4%), el cual cruza el Peaje las Palmas y se extiende hasta la urbanización MonteRosso. Aunque su longitud es superior, el desgaste es imperceptible y el reloj se detiene a los 50 min. Un poco de agua y seguimos pedaleando hasta Indiana Mall, donde tomamos la segunda salida para descender al parque principal de Envigado. Una vez allí, visitamos la Iglesia de Santa Gertrudis, luego buscamos la Calle 36 Sur y empezamos a escalar Alto el Escobero (11 Km, 8%), un puerto que pone a prueba el cuerpo tanto en la subida como en la bajada. Si lo comparamos con otros ascensos, este es el único en el que hemos deseado tener un carro escoba, pues hay zonas tan inclinadas que la velocidad de avance se reduce a menos de 3 Km/h. A ese ritmo, y con el desgaste pasando factura, tuvimos que esperar 3 horas para ver la estación de gasolina que marca el final del segmento. Hacemos una breve pausa para comer, regresamos al Peaje Envigado y giramos a la derecha para cruzar el Embalse la Fe e ingresar a Rionegro por Llano Grande.
Jornada 2: Guacaica y El Chocho
Si el primer día del BikeCamp fue difícil, este fue una pesadilla pues un merengón, que juramos no volver a probar, produjo una bacteria en uno de los integrantes de TEB. A pesar del escenario poco favorable, seguimos con nuestro plan y salimos a primera hora con dirección a Marinilla para escalar dos puertos que hoy son famosos gracias a la edición 2018 del Giro de Rigo. Cruzamos el municipio, avanzamos por la vía al Peñol e iniciamos una bajada increíble que se extendió hasta San Rafael, a 25 Km de Amagamiento. Hasta ahí todo marchaba bien, así que comimos algunos carbo y empezamos a subir Alto Guacaica (13 Km, 6%), pero unos minutos después, a la altura de la Central Hidroeléctrica Guatapé, el cuerpo se cortó, el ritmo decayó y llego la deshidratación. Aunque esa fue la primera vez que nos vimos en apuros por una intoxicación, no tuvimos otra opción que continuar ya que no pasó ni un alma para pedirle un aventón. Después de hora y media, y bajo un sol de 28°C, llegamos vaciados a Guatapé. Tomamos un caldo para mejorar las sensaciones y avanzamos hasta el Peñol, donde nos esperaba Alto El Chocho (7 Km, 4%). Este ascenso, bastante pintoresco por el abundante número de restaurantes que lo rodean, es una versión miniatura de La Tribuna por su reducido espacio. La subida es manejable, pero el dolor y el desgaste, más los carros adelantando mientras rozan el manillar, hacen el camino una carga difícil de llevar. 30 min más tarde, y en medio de un tranque, finalmente apareció Marinilla. Un par de minutos más y ya estábamos de vuelta a Rionegro para descansar y festejar con suero rehidratante.
Jornada 3: La Virgen
Tras un intento fallido para que la EPS realizará unos exámenes médicos, como seguramente les ha pasado, al día siguiente decidimos volver a la bicicleta con nuestra bacteria para terminar la tarea que habíamos empezado. El cierre del BikeCamp Antioquia consistió en ir desde Rionegro hasta Bello para documentar uno de los ascensos más largos de la región y atravesar “la puerta del oriente antioqueño”. El primer municipio que visitamos fue Guarne, donde comimos almojábanas mientras admirábamos la belleza de su iglesia; luego avanzamos por la autopista Bogotá-Medellín y 6 Km más adelante, pasando una estación de gasolina, encontramos la bajada del Alto de la Virgen (16 Km, 5%). El descenso, de doble calzada y con una hermosa vista al área metropolitana del Valle de Aburrá, es muy parecido al segmento El Rosal-La Vega por lo que no hay que hacer ningún esfuerzo para alcanzar los 45 Km/h. En cuestión de 22 min, y después de cruzar el túnel y el Peaje Copacabana, llegamos a Bello. Buscamos el puente que cruza el Río Medellín, damos media vuelta y empezamos a escalar el puerto que, a pesar de no tener ningún repecho, se puede pedalear a buen ritmo y sin pausa mientras se disfruta el paisaje. Ya en la cumbre, que se reconoce por un nido de árboles, seguimos por la autopista Medellín-Bogotá hasta Rionegro, celebramos el cierre de la temporada 2019 y al día siguiente empacamos las bicicletas para regresar a Bogotá.